Un nuevo ganador del mundial, problemas con los pianos y dos pilotos terminando en el centro médico. Este ha sido el GP de Qatar 2023
“Ha sido muy duro, límites de pista, te pintan unos pianos, no puedes ver la pista. Estás mareado, está oscuro y te desvaneces… Tienes la presión baja, te estás desmayando en el coche y te sancionan por los límites de pista. Es una broma.” Estas fueron las declaraciones de Lance Stroll, en uno de los Grandes Premios más infames de la historia de la competición.
La aparición del circuito de Losail en el calendario, no ha sido ninguna sorpresa. Ya en 2021 se utilizaron estas instalaciones para sustituir otro circuito que había sido cancelado por el Covid. Por aquel entonces los pilotos y los equipos se quejaron de los pianos, ya que eran muy agresivos con los neumáticos causando muchos pinchazos durante la carrera. En esta como en muchas otras competiciones deportivas, los países de la península arábiga tienen un gran atractivo para los bolsillos de las federaciones. Y pese a las negativas experiencias del pasado, la FIA renovó contrato y el circuito continuará además en futuras fechas.
El desastre de la FIA
El sábado por la mañana, tras los entrenamientos libres, un comunicado de la FIA anunciaba que, en base a los análisis de Pirelli sobre los neumáticos, las ruedas habían sufrido graves daños, mayoritariamente a causa de los pianos del circuito.
Losail desde su concepción siempre había sido un circuito para motos. Es por ello, que los pianos diseñados por la FIM (Federación Internacional de Motociclismo), denominados Misano-200, no están adaptados para la llegada de la Formula 1. Y la FIA era plenamente consciente de ello desde 2021 cuando ocurrió exactamente lo mismo.
La solución de la FIA: acortar el circuito en las curvas donde los pianos causaban más daños. Y sin informar a pilotos y escuderías se cambiaron los límites de pista en las curvas 12, 13 y 14. Todo ello para evitar que los monoplazas pasasen por encima de esas “pirámides” de pianos.
En vista de que los pilotos tendrían que comenzar la «sprint-shootout» sin conocer el nuevo trazado, la FIA se saco de la manga una “Sesión de familiarización”. Esta consistió en 10 minutos donde se dejó circular libremente a los pilotos para adaptarse a los cambios recientemente implementados. Y con 10 minutos de retraso, en la clasificación de la sprint, los daños persistieron.
Es por ello por lo que el domingo, la FIA impuso un máximo de 18 vueltas por cada set de neumáticos y 20 si era un set de neumáticos usados. Lo que implicaba un mínimo de tres paradas en una carrera que, de optimizar la vida útil de las gomas, se pasarían únicamente una o dos veces por boxes.
Condiciones extremas
El problema fue la temperatura que hace en Qatar en octubre. Durante la carrea 32°, con sensación térmica de 40°. Añadiendo que hacer para tres veces a los pilotos, obliga a que la estrategia ideal, pase por tener que exprimir al máximo cada stint, e ir a máxima velocidad durante la hora y media que duró la carrera.
A eso añade ir pegado al lado de un motor que llega a más de 300 km/h en las rectas, un circuito con cantidad de curvas rápidas, lo cual es ideal para las motos y que la bebida dentro del monoplaza es limitada. La tormenta perfecta para el desastre.
El certamen terminó con el campeón del mundo y los dos McLaren tirados en el suelo de la antesala del podio. El mismo Verstappen comentó que fue la carrera más dura en la que había competido. Pilotos como Russell sacaban las manos del monoplaza durante la recta para tratar de refrigerarse haciendo entrar aire en el cockpit. “Pensaba que me iba a desmayar” comentaba el piloto inglés. Leclerc también hizo comentarios similares expresando además que en las curvas rápidas todo se veía borroso. Fernando Alonso llegó a pedir por radio que le echasen un cubo de agua durante una de las paradas.
Los más damnificados
El debutante Logan Sargent tuvo que retirarse en la vuelta 41 debido a que ya no podía más. Las radios del equipo con el norte-americano muestran como durante varias vueltas su ingeniero trató de persuadirlo para abandonar: “Tú decides si te retiras o no Logan. No hay ninguna vergüenza en retirarse si te sientes mal”. Al aparcar el coche en boxes, el piloto de Williams llego a necesitar ayuda para salir y caminar. El otro piloto de la escudería inglesa, Alex Albon, acabó en el centro médico.
Sin embargo, el que peor lo pasó fue Stroll. Imágenes muestran como durante algunas vueltas, el piloto canadiense se desmayaba en mitad de la recta principal. Al llegar al pitlane estaba casi sin conocimiento. Y tras salir con gran dificultad del vehículo, prácticamente sin equilibrio, se abalanzó sobre la ambulancia para pedir ayuda y de ahí le llevaron al centro médico. En sus declaraciones postcarrera, se sentía la frustración de estar tan cerca del top 10, y que, pese a las sanciones por límites de pista, a causa de su estado, no pudiese lograr puntuar. Después de este gran premio ya son cinco los circuitos consecutivos en los que Stroll no puntúa.
Otro caso insólito fueron las radios de Esteban Ocon al concluir la carrera, en las que comenta a su ingeniero que había vomitado dentro del casco en la vuelta 15. Y estos no fueron casos aislados. La mayoría de competidores acabaron con síntomas de deshidratación y mareos.
Resultados del fin de semana
Verstappen lideró todo el fin de semana excepto en la sprint, donde brilló Oscar Piastri. El neerlandés fue coronado como campeón del mundo ya en la sprint, puesto que con el abandono de su compañero Sergio Pérez, por un choque con Ocon y Magnusen, le coronaba matemáticamente campeón del mundo.
En la carrera ocuparon el segundo y tercer lugar del podio los McLaren, ante la autodestrucción de los Mercedes en la primera curva del gran premio. El rookie de la escudería papaya, Oscar Piastri, quedó a tan solo 5 segundos del Red Bull, abriendo un pequeño rayo de luz en la, hasta la fecha, dominación absoluta de la escudería austriaca. El tercero, Lando Norris, consiguió remontar 7 posiciones y aguantó detrás de su compañero con órdenes de equipo de por medio.
Pese al accidente de Mercedes, que mandó a Hamilton a la grava y a Russell a la última posición, Ferrari solo logró una quinta posición de Leclerc, opacada por la extraordinaria remontada de Russell hasta la cuarta posición. Carlos Sainz ni siquiera pudo salir a pista, tras detectarse en su monoplaza una fuga de combustible justo antes de la carrera. Frederic Vasseur, ingeniero jefe de la escudería italiana, atribuyó estos daños a los pianos del circuito.
Alonso pudo salvar una sexta posición, tras salirse de pista dos veces. En la segunda, a mitad de carrera, llegando hasta la grava y necesitando utilizar una de las escapatorias del circuito. Esta maniobra le costó la posición con Leclerc, además de provocarle daños en el fondo plano, lo cual redujo su ritmo en pista.
