Una victoria más de Verstappen, competitividad entre Mercedes, McLaren y Ferrari, batalla estratégica y dos descalificaciones
La superioridad de Red Bull se ve en duda frente a los resultados del fin de semana.
Pese a que el holandés, de nuevo, ha vuelto a ganarlo todo, llegó a cometer fallos que le costaron la sexta posición en la parrilla del domingo. Además, de los resultados muy discretos de Sergio Pérez durante todo el gran premio.
Por detrás, se agolpan Mercedes, McLaren y Ferrari, con una rivalidad muy ajustada. La estrategia más que el ritmo de los monoplazas determinó el reparto de puntos. Destacando un Leclerc muy rápido en ambas clasificaciones. Un Hamilton con mucho ritmo en las tandas largas, que luchó por la victoria. Y un Norris que lideró aproximadamente la mitad de la carrera. Destacando la décima plaza del debutante, Logan Sargent, que consiguió sus primeros puntos en casa.
Las descalificaciones
Sin embargo, la guinda del pastel la puso la FIA. Horas después del final de la carrera, anunció la descalificación de Hamilton y Leclerc, algo que no pasaba desde el 2021 cuando Hamilton también fue descalificado. Terminaron segundo y sexto respectivamente. Lo que implicó un aumento del reparto de puntos entre el resto de clasificados.
Simple y llanamente fueron descalificados por rodar más bajo de lo permitido. En el fondo de cada monoplaza existe una plancha de 10mm de grosor, que de manera longitudinal recorre el vehículo prácticamente de principio a fin. Esta plancha sirve para que la FIA pueda comprobar que los coches no hayan circulado demasiado bajo frente al asfalto, ya que cuanto más pegado vaya un formula 1 al suelo, más fuerza de succión generará el aire al pasar por debajo del vehículo, y, por tanto, mayor velocidad alcanzará, especialmente en rectas y curvas rápidas.
En total, la FIA solo permite que esta madera se desgaste un milímetro. Y al revisar los monoplazas de Verstappen, Norris, Hamilton y Leclerc encontraron que los dos últimos contaban con un desgaste mayor y por lo tanto debían ser descalificados. El problema radica que estos cuatro coches fueron los únicos que revisó la FIA.
¿Y por qué la FIA no revisó al resto de competidores?
El protocolo estipula que se realicen cuatro revisiones y al azar. Pero si encuentras que la mitad de placas que revisas son ilegales, lo lógico sería pensar que más vehículos pudiesen haber incurrido en la misma infracción del reglamento, en especial la de los coches de la misma escudería que probablemente compartiesen configuración.
A pesar de ello, la FIA no llevo a cabo más investigaciones. Todo parece apuntar a que, desde la federación, se quería evitar una cascada de descalificaciones y decidieron no buscar algo que no querían encontrar. No obstante, la situación sigue siendo completamente injusta para los dos descalificados.
Esto demuestra que, en cada uno de los grandes premios de la temporada, han podido competir coches ilegales y, de todas maneras, haber pasado la verificación de la FIA. Aun contando con miles de millones en recursos, ¿no es la FIA capaz de examinar los 20 monoplazas?
La reacción de los equipos
Pese a lo que pudiera esperarse, ninguna de ambas escuderías se ha quejado. En los documentos de la descalificación expresaron que no tenían nada que objetar, porque los análisis llevados a cabo por la federación eran correctos, pero que quizá ese desgaste excesivo se debiese a la mezcla de que, el circuito de Austin está muy bacheado y que hubo formato de sprint. Lo cual no les excusa, pero si expone una realidad. La falta general de tiempo que tienen los equipos para preparar el set-up, de cara a la carrera, cuando hay sprint. En este formato solo hay unos entrenamientos libres. Algo que puede resultar emocionante, puesto que al tener las escuderías menos tiempo para prepararse, tienen que arriesgar más con sus estrategias.
Esta falta de tiempo no solo causo dos descalificaciones, que pudieron ser más. Cuatro pilotos tuvieron que salir el domingo desde el pit-lane, los Haas y los Aston Martin, a causa también de la falta de entrenamientos libres. Ambas escuderías estrenaban mejoras que no les dio tiempo a probar y sacar conclusiones. Todo ello para que la FIA siga inflando sus ya repletos bolsillos, introduciendo una mini clasificación, a pesar de que el día anterior ha habido una prácticamente igual, y una mini carrera; en la que se desvela lo que va a pasar el domingo y encima le quitas la batalla estratégica, que en este circuito es lo único que da algo de juego. Repartiendo unos puntos que muy rara vez benefician a la zona baja de la tabla e incrementan aún más la diferencia entre los que dominan el campeonato.
En palabras del propio Verstappen: “¿Quieres mi opinión sincera sobre las sprint? No me emocionan. Creo que solo necesitamos una clasificación por fin de semana, donde lo das todo y se siente genial. Esta mañana (en la sprint shootout) terminas primero y pfff… Y quitando eso, ahora hemos hecho esta carrera (Sprint) y todos saben más o menos lo que sucederá mañana y las diferencias entre los coches. Quita un poco la emoción. Si no hubiésemos hecho esta carrera hoy y solo tuviésemos una clasificación, la que hicimos ayer, no sabrías lo que puede pasar en la carrera. Entonces sería emocionante encender la televisión, porque no lo sabes. Ni nosotros lo sabemos. Y ahora sí, un poco. (…) Si fuese un fan estaría decepcionado, porque más o menos sabes qué pasará mañana, a no ser que suceda algo loco”
Resultados del fin de semana
Después de cometer un error en la clasificación, el neerlandés pudo regresar poco a poco al liderato. Fin de semana en el que no parecía tener mucho más ritmo que sus competidores. Sin embargo, observando las imágenes de los coches en pista, los Red Bull rodaron bastante más altos que los Mercedes y los Ferrari. Sacrificaron velocidad, jugándose la victoria para asegurarse al menos un buen resultado y evitar las descalificaciones. Destellos de brillantez que una vez más, nos recuerdan quien es el amo y señor del trofeo de constructores desde mitad de temporada.
Usando una estrategia más agresiva, a dos paradas, Hamilton se quedó segundo a pocos segundos de atrapar a Verstappen. Pero mejor que fuese así, porque despojar al hepta-campeón de su primera victoria en dos años hubiese sido devastador. Y con su descalificación, Lando Norris se alzó con el segundo puesto. A pesar del gran ritmo del conductor de McLaren, que logró liderar aproximadamente la mitad de la carrera, empezaron a desinflarse y a punto estuvo Sainz, el tercer clasificado, de atraparle.
Ferrari
Tras la tremenda degradación que sufrieron los italianos en la sprint, de Ferrari no se esperaba nada. Sin embargo, a pesar de la descalificación del Leclerc, que logró la pole, consiguieron una tercera posición que los acerca a Mercedes, su principal rival, por la segunda posición, en el campeonato de constructores.
En carrera la pole de Leclerc no sirvió de nada. Un ritmo insuficiente y una estrategia terrible, marca de la casa, determinaron su sexta posición (que posteriormente se convirtió en descalificación). Intentaron ir a una sola parada, en un trazado con mucha degradación. Destacan también las radios en las que, en contra de su voluntad, tuvo que dejar pasar a su compañero.
Aston Martin
Por detrás Fernando Alonso lo tuvo todo en contra. La falta de tiempo para probar las, tan necesitadas mejoras, dejó a los dos Aston Martin fuera de la clasificación ya desde la Q1. Tras lo que decidieron salir desde el pit-lane para intentar entender la nueva configuración de los monoplazas. Para ello Alonso mantuvo las especificaciones de Qatar, mientras que su compañero, Lance Stroll, salió con todas las mejoras para comparar. Y analizando el resultado del canadiense, séptimo, las mejoras han podido haber surtido efecto. Aún así y sin mejoras, Alonso presentó un ritmo mayor.
Las batallas no cesaron en toda la carrera para el español. Tras un excelso recital de adelantamientos, digno de un piloto con 20 años de experiencia, destacan el correoso Magnusen, que le hizo perder varios segundos y un tercer stint de neumáticos duros, con los que parecía que volaba hacia la octavaba posición. Desgraciadamente a pocos segundos de alcanzar al Alpine de Pier Gasly, una rotura del fondo plano le hizo abandonar la carrera, tal vez, por rodar demasiado bajo. Desde el pit-lane hasta una octava posición que se hubiese convertido en una sexta con las descalificaciones.