Fernando Alonso tiene admiradores y detractores a partes iguales en la Formula 1: su enemigo público número uno vuelve a escena
Pocos pilotos en la parrilla de Formula 1 tienen tantos admiradores como Fernando Alonso. Incluso el mismísimo tricampeón del mundo, Max Verstappen, se ha rendido en varias ocasiones al asturiano. Siempre ha declarado que el español es una de las grandes razones por las que se enamoró de este deporte. Comparte, además, que debería tener más títulos mundiales de los que tiene realmente. Solo lleva dos, pero lo cierto es que se ha quedado a las puertas de dos o tres más.
Fernando Alonso podría ser pentacampeón del mundo fácilmente, pero siempre ha competido en desigualdad de condiciones respecto a sus rivales. En Ferrari tuvo que competir contra el primer Red Bull dominador, el de Sebastian Vettel. No pudo hacer nada contra él, pero lo intentó y le aguantó hasta las dos últimas carreras. El paso del asturiano por la escudería italiana sigue siendo de lo más recordado en el paddock de Formula 1. Tan aplastante era el talento de Alonso, que Felipe Massa, un gran piloto y subcampeón en 2008, no supo estar a la altura del que era su compañero por aquel entonces.
El mensaje que está dando la vuelta al mundo: el ataque que todos esperaban
Precisamente, Felipe Massa ha vuelto a ser noticia después de volver a hablar acerca de Fernando Alonso y de cómo fue su convivencia en el equipo Ferrari. La realidad, según el brasileño, es bastante diferente a lo que están acostumbrados en la Formula 1: «De hecho, siempre me llevé bien con Fernando en lo personal. Pero lo que me dijo no fue lo mismo que le dijo al equipo. Tenía mucho poder y trató de usarlo para que todos estuvieran de su lado. Eso dividió al equipo y no fue tan bueno».
Ha comparado a Fernando Alonso con Michael Schumacher, pero no como esperábamos: «Se sintió diferente con Fernando que con Michael Schumacher. Yo quería vencerlo y él quería vencerme a mí. La forma en que trabajé fue diferente, porque traté de aprender lo más posible de Michael«. No recuerda esos años con especial cariño ni mucho menos: «No quiero decir que no fue justo, el equipo no hizo nada malo, pero la forma en que trabajaron y la forma en que lo cuidaron hizo que no fuera muy agradable para mí». Un periodo muy duro: «A mitad de temporada de repente dijo que ya no quería sentarse en el simulador porque no le servía de nada», añadió durante el podcast Track Limits.
Ganó en Singapur, y…: «El entonces presidente de Ferrari, Luca di Montezemolo, dijo a los medios lo increíble que era ver a Fernando en el trabajo y cuánto trabajaba con el equipo, cada semana en la fábrica y en el simulador. Cuando escuchas eso como segundo conductor, te destruye mentalmente». El enemigo público de Fernando Alonso ha sido noticia de nuevo.