No conduzcas jamás un coche sin seguro: la infracción podría tener un coste más que elevado acorde a las leyes vigentes
La legislación es clara al respecto pese a no conllevar delito penal. El artículo primero de la ley de Responsabilidad Civil y Seguro en la circulación de vehículos obliga a contratar un seguro a cualquier poseedor de un automóvil en España. Como mínimo ese seguro debe cubrir los daños que se causen a terceros, ya sean personas o vehículos. Todos los vehículos, estén en constante circulación o estacionados durante periodos largos, deben contar con ese seguro de, como mínimo, responsabilidad civil ante terceros.
En España hay más de 2,6 millones de vehículos circulando sin seguro, según las estimaciones de diversos estudios versados en la materia. Esta cifra se podría transformar en torno al 8% del parque móvil nacional. Sin embargo, la Dirección General de Tráfico (DGT) admite que “es difícil saber cuántos coches están circulando sin seguro con exactitud”. Estos vehículos de todo tipo y condición son un pequeño gran peligro en la carretera al no contar con una póliza ni una inspección técnica que respalde su circulación.
Un coche sin seguro: la peor forma de estar sobre el asfalto
El mismo estudio afirma que en los últimos diez años se han producido en torno a 300.000 accidentes con vehículos sin asegurar inmersos en estos choques. Estos siniestros son más graves ya que la posibilidad de percance físico se multiplica por dos. Tener seguro es algo importante y, lo más importante, obligatorio por ley.
Conducir sin seguro conlleva una infracción administrativa. Además de conllevar una multa económica de cuantía variable, podría acarrear otro tipo de sanciones y consecuencias de diferente gravedad. La cuantía de la multa podría ir entre los 601 euros y los 3.005 en función de los siguientes parámetros: tipo de vehículo, años de circulación sin seguro, disponer de permiso de conducir para ese vehículo (recordemos que hay varios tipos de carnets) o reincidencia.
Además de la multa económica, el ciudadano que cometa esa infracción podría hacerse cargo de otro tipo de sanciones. Evidentemente, tendrá que asumir el coste de los daños causados por el accidente y del juicio si se acude a un juzgado civil, de la misma manera el vehículo quedará retenido en un depósito municipal hasta que el coche disponga de un seguro de circulación. Los gastos de este estacionamiento correrán a cargo del infractor. Es decir, del dueño del vehículo aunque no sea el conductor en el que momento del incidente.
No conduzcas jamás un coche sin seguro. La seguridad y la legalidad deberían ser siempre las cosas más importantes cuando estás sobre el asfalto.
