Pirelli ha explicado que será un desafío técnico competir en un circuito sin referencia: el GP de Las Vegas, un desconcierto máximo
La penúltima carrera de la temporada se celebrará el sábado por la noche en lugar de el domingo, algo que no ocurría desde 1985. En Las Vegas habrá un Gran Premio inédito, donde existe preocupación entre las máximas esferas de la Fórmula 1 por el frío que habrá en el desierto de Nevada, donde muchas previsiones marcan temperaturas entre los 8° y los 14°.
Por ello, será muy difícil calentar los neumáticos para los monoplazas. El jefe de Pirelli, Mario Isola realizó unas declaraciones señalando que será un reto para la competición, correr en un circuito que estará de estreno. «La superficie será una mezcla del asfalto habitual de las calles con otras partes que han sido completamente asfaltadas para la ocasión. No habrá categorías soporte y la pista se abrirá nuevamente al tráfico normal durante largos tramos del día», detalla Mario Isola.
El mandamás de Pirelli en la Fórmula 1 es el máximo responsable de asesorar y resolver todas las dudas que se plantean acerca de las gomas que deben usarse para cada carrera. Mario tiene muchos interrogantes, y cree que habrá una evolución en la pista conforme pasen las vueltas. Isola compara el Gran Premio de Las Vegas con el circuito de Azerbaiyán e Italia: «Esperamos que los coches tengan niveles de carga aerodinámica bastante bajos, similares a los de Bakú o incluso Monza. «Alcanzar una velocidad máxima alta será clave para ser competitivos», reflexionó.
Ross Brawn admite la falta de previsión de la F1 con las temperaturas
Ross Brawn es una de las máximas referencias de la Fórmula 1. Llegó a ser director en distintos equipos y Michael Schumacher, Jenson Button, o Nico Rosberg entre otro estuvieron a sus órdenes. El británico se retiró en 2022, pero con motivo de una cita tan importante como la que será el Gran Premio de Las Vegas realizó unas declaraciones a Planet F1 admitiendo el gran desafío: «Cuando se lleve a cabo la carrera, que será el sábado por la noche, la temperatura bajará a tres o cuatro grados”.
“Por lo tanto, puede hacer bastante frío y, por supuesto, hacer que los coches funcionen a esas temperaturas puede ser un desafío», expresó. Con sus palabras reconoce que se arriesgaron en la elección y muchos flecos quedaron pendientes, pero al mismo tiempo defiende el trabajo de Pirelli y motiva a los aficionados a seguir un Gran Premio que será aún más “espectacular” con el aliciente de las temperaturas: “Pirelli ha trabajado para asegurarse de que los neumáticos puedan hacer frente a eso. Definitivamente nos enfrentamos a nuevos desafíos que nunca antes habíamos tenido, pero creo que será espectacular”.
Mientras tanto, el jefe de ingeniería de Mercedes, Andrew Shovlin, ha seguido la misma línea que Brawn: “Cuando haces una tanda, es muy difícil que los neumáticos se enciendan ya que puede haber ‘graining’ y cosas así”. Por ello tiene la idea de que en la ‘qualy’ habrá sorpresas: Será interesante tener que competir y clasificarse en esas condiciones».
En cualquier caso se plantea un escenario muy difícil para los pilotos y los equipo al no saber cómo funcionarán los neumáticos. Será difícil de predecir quiénes parten como favoritos en el GP de Las Vegas con Pirelli de fondo.